El proyecto SinestesiÄ
Creamos accesorios makarras y elegantes, nos encanta crear diseños personalizados. Dinos tu idea y la creamos juntxs!!!
Hola, soy Noe
Nací en Euskal Herria y soy diseñadora en SinestesiÄ.
Este proyecto nació en Barcelona en el 2010, donde compré mi primera remachadora, y junto a dos amigxs más, comenzamos a hacer cinturones de estilo punk (leopardo, zebra, pinchos…) y a utilizar nuestros primeros materiales reciclados como rueda de bici.
En Barcelona diseñamos juntos durante dos años, hasta que en el 2012 me mudé con SinestesiÄ a Nafarroa, mi lugar natal. Fue en ese momento cuando empecé a reciclar materiales que me sacaba mi abuelo de su taller (piezas de bici y moto como cámaras, piñones, cadenas, rodamientos, etc.), y SinestesiÄ, gracias a dichos materiales y a la gran inspiración de Wendy.O.Williams, mi musa, (cantante de Plasmatics, música que no dejaba de sonar en el taller, y primera persona que vi con un arnés puesto: ese look Mad Max beyond Thunderdome), evolucionó desde los cinturones de leopardo en colores a…
Cinturones, Arneses, Ligueros y Chockers en Caucho, Cuero y Metal.
SinestesiÄ se define por sus Piezas Únicas, Brutas y Macarras, a la vez que Elegantes, Finas y Resistentes.
2015, London
En el 2015 compré mi segunda remachadora y me mudé a Londres con ellas. Allí conocí a una gran amiga y diseñadora: Cas Carpenter (Engineers of Desire), la cual tenía un estudio increíble y bien equipado en Dalston, norte de Londres.
Ella disponía de máquinas industriales de costura que podían coser el caucho (cámara de bici) y es allí donde aprendí a coserlo.
Mi técnica de diseño con ella fue evolucionando cada vez más y más. Empezó a llevarse mis diseños junto a los suyos a festivales bdsm de Berlín, e íbamos así cumpliendo objetivos.
Viví y me impregné del movimiento underground de Londres durante tres años, creciendo cada vez más como marca, y fue allí donde nacieron mis primeras colaboraciones con otrxs artistas , diseñadorxs, estilistas, maquilladorxs, fotógrafxs…
En el 2019/2020 decidí volver a mis montañas, y es entonces cuando instalé el taller que siempre había querido: compré una máquina de costura industrial de triple arrastre y conseguí dos remachadoras más.
Desde entonces seguimos currando, aprendiendo, impregnándonos, y pensando en colecciones y colaboraciones nuevas. ¡Maquinando día a día para poder seguir adelante!